16 de noviembre de 2011

EL CUENTO DEL CHORRITO

Hasta hace muy poco tiempo creía a la lucha contra la minería como algo sectorizado y aislado de mis propias luchas. En San Salvador temas como el  acceso al agua y la  contaminación,  nos han dejado de preocupar y decimos: nos solidarizamos con las luchas de nuestros hermanos y hermanas en cabañas ¿pero en realidad es la manera de apoyar estas luchas?

Siendo una persona que ha vivido siempre en San Salvador nunca me preocupo el tema del agua sabia quizás lo básico de esta lucha pero nunca la entendí en toda su magnitud, el agua está en  el chorro, esa es nuestra imagen mental ¿pero en realidad de donde viene el agua de ese chorro?

El Rio lempa abastece a 4 millones de salvadoreños y salvadoreñas siendo en mayor medida en San salvador, el rio lempa nace en Guatemala es frontera natural entre Honduras y El Salvador.

¿Qué significaría entonces una empresa minera  tan cerca de esta principal fuente de agua? Es algo entonces que debería de preocupar no solo a los capitalinos sino a todo el país ya que en 20,000 km cuadrados no hay muchas opciones sobre este tema.

Es entonces cuando reflexiono y me doy cuenta que es algo que me quitara  el agua de mi preciado chorro, quizás podrimos seguir la tubería y ver en realidad de donde parte lo que creemos tan fácil, pero a la vez tan delicado, vulnerable y capaz de llevar a la destrucción a nuestro país.

Lo primero que me plantee  entonces es  ¿qué puedo hacer?  Al informarme  me permití darme cuenta que  la historia  del  chorro  no era tan cierta;  y que el rio que vemos en  los mapas en las escuelas, es prácticamente el corazón y la vida de nuestro país,  y que la única forma en que podemos parar estos proyectos de muerte con Cerro Blanco.

Me hace darme cuenta que es necesario también la organización de la gente del país y que el tema sea tomado como algo de vida o muerte, que nos desencantemos del cuento del chorrito y empecemos a ver que aun se puede detener esto.


La lucha contra la minería ya dejo de ser un asunto solo de cabañas ahora la defensa del medio ambiente y de nuestros recursos se debe de trasladar a la ciudad por eso ahora digo STOP CERRO BLANCO.

Por: Henry Martinez

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